Checas de Madrid

Checas de Madrid

El término “checa” se difundió entre la población madrileña en el verano de 1936 y lo extendieron personas que huían de Madrid, haciéndose eco de las vicisitudes y los sufrimientos pasados

Investigadores

IP: Alfonso Bullón de Mendoza
Número de investigadores: 5

Investigadores Checas de Madrid
Año

2011-2012

Año del proyecto Checas de Madrid

Las checas fueron centros facultados para realizar detenciones, requisas y asesinatos durante la Guerra Civil española. Su actividad en Madrid comienza en julio de 1936 y, en muchos casos, se prolonga hasta noviembre de ese mismo año, continuando algunas de ellas su actividad bajo otras formas. En esos meses, más de 1.000 chequistas sembraron el terror en Madrid y asesinaron a cerca de 3.000 personas, triste balance que denota su importante papel en la represión frentepopulista.

Checas de Madrid es el resultado de más de 3 años de investigación del Instituto CEU de Estudios Históricos (Universidad CEU San Pablo). El proyecto Checas de Madrid, objeto de subvención en régimen de concurrencia competitiva por parte del Ministerio de la Presidencia, es un ejemplo de la cobertura de ese Ministerio a la investigación sobre la memoria histórica que recogen las Órdenes PRE/480/2011, de 2 de marzo y PRE/809/2011, de 4 de abril (Resolución de 24 de noviembre de 2011).

El 30 de septiembre de 2016 se presentó y se hizo entrega de un ejemplar de Checas de Madrid al Comisionado de la Memoria Histórica del Ayuntamiento de Madrid. Checas de Madrid ofrece un repertorio mucho más completo de checas que el que aparece en la lista del libro La dominación roja, que es el que se ha venido manejando y repitiendo en la bibliografía que se ha ocupado hasta ahora de las checas.

En aras de la recuperación de la memoria histórica y el reconocimiento de las víctimas de la Guerra Civil, es preciso ofrecer a la sociedad una visión completa y verdadera de las checas de Madrid, objeto de esta página.

Publicación de resultados

En mayo de 2019, ante las numerosas consultas que recibe el Instituto CEU de Estudios Históricos relativas al proyecto Checas de Madrid, y dado que dicho proyecto no está recogido en el Centro Documental de la Memoria Histórica, el Instituto hace públicos sus resultados más significativos cumpliendo con los mandatos expresos de la convocatoria de 4 de abril de 2011: “recuperación de la memoria histórica y el reconocimiento moral de las víctimas de la guerra civil” y “Adecuada publicidad a la subvención concedida mediante incorporación del logotipo oficial del Ministerio de la presidencia (Anexo VI) en los resultados del proyecto subvencionado”.

Ministerio de la Presidencia




Actividad de las checas incluidas en lista de La dominación roja (checas) y de las checas no incluidas en dicha lista (otras checas) representada sobre el plano de Madrid de 1937 y la división administrativa vigente durante la Guerra Civil (1898, 1902). Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.


Localización de todas las checas (incluidas y no incluidas en La dominación roja), de las cárceles y de otros lugares de detención sobre una imagen de Madrid de 2007 de Google Earth y la división administrativa de 1898 sobreimpresa.

Equipo de investigación

Director

  • Alfonso Bullón de Mendoza y
 Gómez de Valugera
    Director del Instituto CEU de Estudios Históricos

Investigadores

  • Ángel David Martín Rubio
  • 
Sara Izquierdo Álvarez
  • Jaime Escolar García
  • Francisco Marhuenda García

Principales resultados del proyecto

  • Identificación 345 checas en el Madrid en 1936: las 225 checas recogidas en la lista “oficial” de La dominación roja del Ministerio de Justicia y 120 checas no recogidas hasta entonces.
  • Catalogación de 50 lugares de detención habilitados por organizaciones sindicales y partidos pero que no aparecen calificados como “checas” en la documentación.
  • Referencia a 23 prisiones oficiales que funcionaron en la capital en diversos momentos de la guerra. Siete de ellas también aparecen en la catalogación de checas del proyecto, pues actuaron como tales durante algún período. Junto con las diez comisarías de distrito, completan el panorama represivo del Madrid republicano.
  • Registro de 1.823 víctimas mortales[1].
  • Cartografía de checas[2], cárceles oficiales y otros lugares de detención, así como de lugares de muerte y con hallazgo de restos, gracias a la geolocalización y al uso de un SIG (Sistema de Información Geográfica).

El interés de las checas de Madrid desborda con mucho el ámbito de la capital de España, objeto de este proyecto:

  • Las checas Madrid capital tuvieron intervención en las actividades represivas efectuadas en el resto de la provincia y en otros lugares de España a los que se desplazaron sus miembros, como ocurrió en las provincias de Ávila y Toledo
  • A las checas de Madrid capital habría que añadir las que funcionaban autónomamente en diversos municipios de la actual Comunidad de Madrid, teniendo alguna de ellas –como la de Alcalá de Henares– una importante actuación.

[1] El cálculo a partir de los casos localizados con posterioridad a la entrega del proyecto y de los datos sobre la represión en Madrid elevaría la cifra de asesinados a 3.000.

[2] Se han georreferenciado 340 checas, 5 checas no han podido georreferenciarse por falta de datos. La consulta de las hojas del Plano de Información sobre la Ciudad, Ayuntamiento de Madrid, 1929, escala 1:2.000, disponible en el Archivo Cartográfico del Instituto Geográfico Nacional, ha sido clave para establecer la correlación entre la denominación de las vías y la numeración de los edificios que ofrecen las fuentes y la numeración actual. El trabajo de campo se ha llevado a cabo una vez comprobada la ubicación de los edificios.

 

Presencia en Medios

Consulta todo lo relacionado con el proyecto en nuestro dossier de Presencia en Medios

¿Qué son las Checas?

El nombre “checa” se atribuye a centros que asumían tareas represivas con facultades para realizar detenciones, requisas y asesinatos.

El término “checa” procede de la Cheká, la primera policía política soviética creada en Rusia en 1917, la “Comisión extraordinaria panrusa para la supresión de la contrarrevolución y el espionaje” (las iniciales Chk son las iniciales del nombre de este organismo en ruso).

A diferencia del caso bolchevique, en España las checas no iban a ser exclusivas del Partido Comunista sino de todas las organizaciones activas en la retaguardia controlada por el Frente Popular. La proliferación del término es un indicio del alto grado de influencia soviética.

La denominación de “checa” se difundió entre la población madrileña y de otras capitales ya en el verano de 1936 y lo extendieron por la retaguardia nacional personas que huían de Madrid, haciéndose eco de los sufrimientos y vicisitudes pasadas. A partir de 1937 –como señala Julius Ruiz– la palabra fue empleada por los anarcosindicalistas para denunciar los métodos de terror empleados entonces por la policía gubernamental y los comunistas.Defender la República equivale a desencadenar la revolución, y la revolución presupone el terror. Toda una serie de personas y organizaciones van a practicar ese terror, utilizando –entre otros instrumentos– las checas.

Antes del 18 de julio, el Gobierno se apoyaba en las organizaciones revolucionarias de izquierda para obtener apoyo parlamentario y mantenerse en el poder. Al mismo tiempo, aquéllas fomentaban una situación prerrevolucionaria. Con el comienzo de la guerra, la revolución se abrió paso mediante la formación de comités, el reparto de armas, la actuación conjunta de las milicias con las fuerzas de seguridad del Estado y el inicio del terror. El Gobierno renuncia a emplear los recursos a que le autorizaban la Constitución y la Ley de Orden Público, es decir, la declaración del estado de guerra y disposiciones anejas a esta situación.

El funcionamiento de las checas resulta difícil de interpretar si se olvida la existencia en paralelo de un Gobierno y de un proceso revolucionario, así como la pugna entre los protagonistas de éste para determinar cuál de las fuerzas implicadas lograría imponer su hegemonía al resto.

Los sectores del Frente Popular implicados en la revolución coincidían en la voluntad de exterminio de las personas y sectores sociales considerados un obstáculo para la nueva sociedad que se pretendía implantar. El Gobierno nunca demostró voluntad efectiva de hacerles respetar la ley, consciente de que dependía de ellos para garantizar su propia supervivencia. Y tampoco los revolucionarios sintieron la inmediata necesidad de crear un nuevo orden jurídico y político. De ahí el caos imperante en una retaguardia donde cada grupo (anarquistas, socialistas, comunistas, poumistas, regionalistas…) movilizó milicias, constituyó órganos de gobierno y administración, creó policías y tribunales y se dedicó a toda clase de ensayos económicos y sociales. La situación empieza a cambiar cuando el Partido Comunista da pasos decisivos para el control del proceso revolucionario al servicio de sus intereses.

Las checas tendrán una evolución semejante, comenzando con una inicial proliferación al servicio de los más diversos grupos, pasando por su drástica reducción en número (sobre todo a partir de la llegada a Madrid de las tropas nacionales en noviembre de 1936), para desembocar en su control por un aparato policíaco desde instancias comunistas.

Período

El período de mayor actividad de las checas transcurre entre la creación de las checas oficiales de Fomento y Bellas Artes a principios de agosto de 1936 y la formación de las Milicias de Vigilancia de Retaguardia a finales de septiembre del mismo año. La actividad continúa hasta noviembre de 1936.

¿Qué determina la práctica desaparición de las checas madrileñas en noviembre de 1936?

La estabilización del frente nacional en Madrid. Ante la huida del Gobierno a Valencia, la situación queda en manos de la Junta de Defensa de Madrid, creada el 6 de noviembre bajo la presidencia del general Miaja y con el comunista Santiago Carrillo al frente de la consejería de Orden Público. Los miembros de las checas que se disuelven se trasladan a lugares de la retaguardia más seguros, siendo dedicados los edificios a otros usos y sufriendo los avatares del conflicto. Las checas que quedan se integran en el aparato policial.

Las patrullas de milicianos formadas en los primeros días de la guerra adquieren pronto carta de naturaleza y se multiplican los registros y detenciones. Cuando las milicias sacan a la gente de sus casas y la llevan en automóvil a la Casa de Campo o a otros lugares de las afueras para ser fusilada se dice que “les dan el paseo” o “paseíllo”. A medida que pasan los días, el procedimiento se vuelve más largo y sistemático y es cuando hacen su aparición las checas: agosto de 1936.

La Policía y el Servicio de Investigación Militar (SIM), creado en agosto de 1937, acogerán a quienes intervinieron en las primeras etapas de las checas.

Cómo era una checa

Conocemos detalles de las checas por las noticias publicadas en la prensa, los relatos de los supervivientes y diversas obras literarias.




Croquis de las dos plantas de la checa instalada en Mesón de Paredes nº 37 por el Ateneo Libertario de Barrios Bajos. El edificio había sido el Convento de Santa Catalina de Sena hasta su ocupación por los revolucionarios.



Otra checa cuya organización espacial podemos vislumbrar es la denominada “El Castillo”, del Partido Comunista y ubicada en la calle Alonso de Heredia nº 9.

 

   

 

Checa de la Carrera de San Francisco nº 2, con acceso también por la calle Don Pedro nº 1, en la antigua casa-palacio del duque del Infantado, incautada el 20 de septiembre de 1936 por miembros de la Agrupación Socialista Madrileña. A la izquierda, escalera de acceso al sótano y puerta de la primera celda; a la derecha, puerta de la segunda celda.
    Algunos ejemplos:

  • Checa de la calle Marqués de Riscal nº 1. El edificio de la checa del Círculo socialista del Sur y de la Compañía de enlace, dependiente del ministro de la Gobernación, tenía planta baja y dos pisos. En la primera planta había un cuartelillo para la guardia, los cuartos de los detenidos, la escalera, el patio de coches (había cinco o seis) y la portería. A la puerta del sótano y dentro de éste hacían guardia los milicianos para que los presos no hablaran entre sí (un testigo declara haber encontrado allí a unas diecisiete o dieciocho personas vigiladas por un miliciano con fusil). En el primer piso estaba el despacho del capitán Vázquez, otro con tres mesas, la habitación de Vázquez, el comedor de todos, un cuarto de baño, la biblioteca, la cocina y varias habitaciones más. En la última planta estaban los dormitorios de los milicianos y la habitación donde se guardaba la ropa de las incautaciones.

 

  • Checa de la calle San Bernardo nº 72. De la checa comunista instalada en el convento de las Salesas de la calle San Bernardo nº 72 se sabe que: “En los pisos altos estaban los calabozos de los detenidos cuyas ventanas carecían de rejas; como algunos de los detenidos se suicidaran tirándose al patio por las mismas, les pusieron las rejas que tienen en la actualidad; una parte de los pisos de referencia estaba ocupado por el Tribunal Sentenciador de la Checa que lo componían Diego Romanillos, Carlos Escanillas (detenidos), el Popelle, Santi, Mario, Víctor y Lucas, estos cuatro últimos eran policías de la DGS; en el piso bajo la Iglesia la tenían convertida en Almacén donde depositaban todos los muebles y enseres que robaban a las víctimas y en los demás departamentos, en unos tenían taller de carpintería, de lavado, de planchado y de arreglo y confección de los géneros que robaban y lo demás se habilitaba para reuniones de las distintas Células de que se componía el Radio; en un techado del patio hay dos grandes boquetes producidos por las balas cuando asesinaban allí a las víctimas (pues según ha manifestado algún detenido, a los más peligrosos los ejecutaban allí, sacando los cadáveres por la noche); en los sótanos está el cementerio de las monjas el que se ha encontrado profanado, las cajas fuera de los nichos, algunas sin tapas, dejando al descubierto los cadáveres; hay allí enterrado un Marqués al que después de profanar el nicho fue fusilado el cadáver”.

 

  • Checa de la calle Fuencarral nº 101. La checa del Comité de la CNT instalada en convento de María Inmaculada de la calle Fuencarral nº 101 tenían habilitado para calabozos un corredor, los sótanos del lado de la cocina, dos celdas de castigo en la planta principal y la cripta del templo; también tenían habilitado para interrogar a los detenidos unos salones existentes en el primer piso, donde algunos de ellos pasaron más de dos días.

 

  • Checa de la Carrera de San Francisco nº 2. En la antigua casa-palacio del duque del Infantado, incautada el 20 de septiembre de 1936 a la familia de Fermín Abella, sus entonces dueños. Utilizada como checa por una Brigada de la Agrupación Socialista Madrileña a las órdenes de García Atadell y, más tarde, por la Inspección de Milicias Populares. El sótano y las celdas se conservan en buen estado. La checa fue testigo de múltiples detenciones y asesinatos, como el del diputado conservador Luis Hermida y su familia.

 

  • Checa de la calle Monederos nº 2. Otro edificio que a pesar de ser de nueva planta alberga en su interior evidencias notables del terror policíaco en el seno del Ejército Popular es el Colegio de las Religiosas Teatinas de la Inmaculada Concepción en Usera. En octubre y noviembre de 1937 perecieron numerosas personas en el entorno, llevadas con engaño y robo a un lugar que acabaría denominándose “túnel de la muerte”. Esta trama fue puesta en práctica por los mandos militares y el comisariado político de la 36 Brigada, de acuerdo con la organización comunista madrileña. Las víctimas eran concentradas en una casa que daba entrada a una bodega con largas galerías que servían de lugar de detención, interrogatorio y tortura. Los componentes de las diversas expediciones fueron asesinados junto a las tapias de la casa y enterrados en unas fosas comunes preparadas a tal efecto en aquel mismo lugar. Según el dictamen emitido por las autoridades forenses el día 29 de octubre de 1939, el número de cadáveres exhumados fue de 67.

Organizaciones responsables




Organizaciones de las checas incluidas en La dominación roja. Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.



Organizaciones de las checas no incluidas en La dominación roja. Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.

¿Qué organizaciones dominan los resortes de la represión y el terror en Madrid durante los primeros meses de la Guerra Civil? Grupos anarcosindicalistas, comunistas y socialistas se reparten el protagonismo.

Organizaciones responsables de las checas incluidas en la lista de La dominación roja y de las no incluidas (otras checas)

Grupo Número de checas
Anarcosindicalistas 83
Comunistas 54
Socialistas 40
Juventudes Socialistas Unificadas (JSU) 17
Milicias y Ejército Popular: Anarcosindicalistas 6
Milicias y Ejército Popular: Comunistas 14
Milicias y Ejército Popular: Socialistas 9
Milicias y Ejército Popular: JSU 1
Milicias y Ejército Popular: Otros 32
Inspección General de Milicias Populares (IGMP) 29
Dirección General de Seguridad 12
Otros 48
Total 345

Organizaciones responsables de otros lugares de detención (sin contar cárceles oficiales)

Grupo Número
Anarcosindicalistas 7
Comunistas 15
Socialistas 8
JSU 3
Milicias y Ejército Popular: Anarcosindicalistas 3
Milicias y Ejército Popular: Comunistas 1
Milicias y Ejército Popular: Socialistas 1
Milicias y Ejército Popular: JSU 1
Milicias y Ejército Popular: Otros 6
Otros 5
Total 50

Resumen del entramado represivo

Tipología Número de lugares
Checas de la lista del libro La dominación roja 225
Otras checas 120
Otros lugares de detención 50
Total 395

 

Actividades

Las checas actúan como centros de detención, interrogatorio, asesinato, robo e incautación.

Las checas hacen una utilización sistemática de la tortura de personas sospechosas o que puedan proporcionar información de interés para los chequistas. Los testigos y supervivientes coinciden en hablar de los métodos usados, como golpes, introducción de palillos en las uñas de manos y pies, aplicación de corriente eléctrica sobre los genitales, quemaduras, inmersiones en agua, mutilaciones… Es en la última fase de las checas, la del terror policíaco, cuando se introducen los métodos específicos de los consejeros soviéticos.

 


Los detenidos llevados a las checas eran interrogados y la decisión sobre su muerte o su libertad se tomaba con rapidez ya que, por su propia naturaleza, las checas no podían albergar presos durante mucho tiempo. Se dieron numerosos casos de personas que pasaron de las checas a las prisiones oficiales, donde resultaron víctimas de las frecuentes “sacas” (Las sacas consistían en la extracción masiva de presos con el objeto de ser asesinados o trasladados).

La actuación de las checas no derivó de incontrolados sino que eran un instrumento privilegiado del terror organizado por los partidos y sindicatos al servicio del Frente Popular y, en ocasiones, por órganos de ese Gobierno. La responsabilidad de lo ocurrido estaba en manos de todas las fuerzas frentepopulistas y del mismo aparato del Estado.Las checas actuaban según su propia iniciativa, aunque no por ello carecieran del apoyo de las autoridades oficiales, que dotaron de carnets de agentes de orden a numerosos chequistas. Sin embargo, nunca se llegó a una actuación coordinada, por lo que el terror de las checas, siendo particularmente cruel y sanguinario, resultó contraproducente e ineficaz en relación con el esfuerzo que supuso la guerra durante los primeros meses.

Localización

Madrid fue una ciudad salpicada de checas, cárceles oficiales y otros lugares de detención, así como de sitios en los que hay documentados asesinatos y hallazgo de restos de víctimas.

Las checas se localizan allí donde cada organización tiene dependencias, pero la mayoría están en edificios arrebatados ilegalmente a sus propietarios a partir del 18 de julio, como palacios y lugares especialmente representativos, iglesias y edificios religiosos. La proximidad de otra checa no es determinante a la hora de elegir ubicación. Todo parece indicar que no hubo un reparto del espacio urbano atendiendo a criterios estratégicos o de planificación para el conjunto de la ciudad.

 

 


Checas y posibles fosas comunes en el sector de la Casa de Campo: AHN, FC- CAUSA_GENERAL, 1531, EXP. 20 fol. 8-9

Checas por zonas de Madrid

ZONA SUPERFICIE Nº CHECAS GEORREFERENCIADAS DENSIDAD
Interior   7’78 km2 113 14’52
Ensanche 15’16 Km2 103 6’79
Extrarradio 45’48 Km2 60 1’32
Total Madrid 68’42 km2 276 4’03
Total checas próximas 64
Total checas 340

Checas por distrito de Madrid

DISTRITO SUPERFICIE Nº CHECAS DENSIDAD
1- Centro 0’69km2 10 14’49
2- Hospicio 0’65km2 9 13’85
3- Chamberí 4’10km2 40 9’76
4- Buenavista 8’33km2 54 6’48
5- Congreso 6’91km2 38 5’50
6- Hospital 4’32km2 16 3’70
7- Inclusa 4’55km2 17 3’74
8- Latina 4’40km2 25 5,68
9- Palacio 21’48km2 37 1’72
10- Universidad 4’31km2 30 6’96
                Total Madrid 68’42 km2 276 4’03
Checas próximas a Madrid 64
Total checas georreferenciadas 340

 

Los chequistas anarquistas aprovecharon sus ateneos libertarios, mientras los comunistas y las Juventudes Socialistas Unificadas se sirvieron de sus Radios y los socialistas de sus Agrupaciones. A estos enclaves se irán sumando edificios incautados, extendiendo su presencia por toda la ciudad, llegando incluso a lugares donde antes de la guerra tenían escaso arraigo.

Atendiendo a la distribución de la ciudad en Interior, Ensanche y Extrarradio, la mayor concentración de checas se observa en el Interior, en los barrios centrales de los distritos de Centro, Palacio, Universidad, Latina, Congreso, Hospital e Inclusa. El parque del Retiro, a pesar de su emplazamiento y extensión, queda al margen de los enclaves represivos, a diferencia de lo sucedido con la Casa de Campo. La densidad de checas disminuye del centro a la periferia, siendo menor en el Ensanche que en Interior y en el Extrarradio que en el Ensanche. En el Ensanche, la zona Sur es la que registra un menor número de checas. Del total de distritos de la ciudad, los de menor superficie son Centro y Hospicio, que además son los únicos que tienen la totalidad de su superficie dentro de la zona de Interior, es decir, sin suelo en el Ensanche o en el Extrarradio, lo que explica el diferencial de densidad respecto al resto de distritos. Por el contrario, la gran peso que en el distrito de Palacio tienen la Casa de Campo y, en menor medida, El Pardo explica la baja densidad de checas en el conjunto del distrito.

Atendiendo a las vías de comunicación, destaca la concentración de checas junto a las principales vías radiales de acceso de la ciudad, siendo especialmente significativo su número en las zonas de Vallecas y Pueblo Nuevo. La línea que atraviesa la ciudad de Este a Oeste, y une el Paseo de Extremadura con la calle Alcalá, permiten dividir Madrid en dos zonas con un volumen de checas muy distinto: la mitad Norte casi duplica el número de checas identificadas en el Sur.

Fuera del término municipal de Madrid, con un número menor de checas, destacan Carabanchel Bajo, Puente de Vallecas, Pueblo Nuevo y Chamartín de la Rosa.

Víctimas

El proyecto Checas de Madrid ha registrado un total de 1.823 víctimas mortales, si bien Nunca será posible saber el número exacto de víctimas de las checas, puesto que muchos de los detenidos eran sacados de sus domicilios y asesinados sin que los familiares pudieran saber cuál de las organizaciones frentepopulistas era la responsable del crimen. A veces las desapariciones dejaban durante años la incertidumbre acerca del paradero de la víctima y lo mismo ocurre con los lugares de enterramiento: aunque en la posguerra se exhuman algunas fosas comunes, en muchos casos no es posible la identificación. El cálculo a partir de los casos localizados con posterioridad a la entrega del proyecto y de los datos sobre la represión en Madrid elevaría la cifra de asesinados a 3.000.




Actividad de las checas incluidas en lista “oficial” (La dominación roja) y de las checas no incluidas en ella (otras checas). Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.



Lugares de muerte y hallazgo de restos humanos. Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.



Otros lugares de detención. Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.



Cárceles oficiales. Fuente: Instituto CEU de Estudios Históricos.

 

Las detenciones que realizaban los miembros de las checas respondían muchas veces a denuncias anónimas; otras veces, se buscaba a los miembros de partidos políticos y de Congregaciones o Agrupaciones piadosas de fieles. Las víctimas de condición eclesiástica (sacerdotes, religiosos y religiosas) constituyen el sector porcentualmente más destacado. Por ello, las checas resultan elemento inseparable del proceso de persecución religiosa sufrido en la retaguardia madrileña.

El método seguido con las víctimas era generalmente el siguiente: después de comparecer el detenido ante el tribunal constituido en la propia checa, éste le interrogaba entre insultos y amenazas, que tenían por objeto arrancarle la confesión de creencias religiosas o ideas políticas; acabado el interrogatorio, dicho tribunal resolvía. Si el detenido era considerado culpable, se escribía en su sentencia la palabra “libertad” seguida de un punto y se le invitaba a irse a su casa. A la salida, le esperaba un grupo de milicianos que le subían en un automóvil y le asesinaban. Si se declaraba que no era culpable quedaba libre, excepto cuando se trataba de personal militar o diputados a Cortes, en cuyo caso pasaban a la Dirección de Seguridad. Los crímenes iban frecuentemente acompañados de robos que alcanzaron cifras de gran magnitud.

Las milicias y checas identificaban a sus víctimas por los ficheros que se les proporcionaban, como el de la Secretaria Técnica del Director de Seguridad, o por los ficheros que conseguían en sus saqueos, como los de Acción Católica y Adoración Nocturna.

Un centenar de checas que causaron víctimas de manera directa (asesinados por miembros de la checa) o indirecta por la entrega de presos a la checa oficial de Fomento, a otras checas o a las cárceles gubernamentales, donde fueron objeto de las “sacas” de presos con destino a los fusilamientos masivos de noviembre y diciembre del 36.

Patrimonio

Al terminar la guerra algunos edificios habían desaparecido o estaban en completa ruina. En la posguerra no hubo voluntad de conservar ningún indicio material de las checas sino que se impuso la reconstrucción y devolución de los lugares a su uso anterior al conflicto. Si a ello se añaden las notables transformaciones sufridas en la trama urbana madrileña, se comprende la dificultad de localizar restos materiales de las checas y evidencias de su utilización como tal en los edificios actualmente conservados.

Relación de checas en palacios, lugares especialmente representativos, iglesias y edificios religiosos:

Edificio conservado en la actualidad Edificio desaparecido Dirección actual o lugar de los desaparecidos
Círculo de Bellas Artes Alcalá, 42
Ministerio de Hacienda Alcalá 11
Palacio de Buenavista, Cuartel General del Ejército Alcalá, 51
Colegio Salesianos de Atocha Ronda de Atocha, 27
Estación de Atocha Glorieta de Carlos V
Iglesia del Carmen y San Luis Carmen, 10
Convento de Dominicas de Santo Domingo el Real Claudio Coello, 112
Palacio de Medinaceli Plaza de Colón
Iglesia y convento de las Comendadoras de Santiago Plaza de las Comendadoras, 10
Cuartel del Conde Duque Conde Duque, 9-11
Cuartel de la Montaña Templo de Debod, Jardines del Cuartel de la Montaña
Real Academia de Ingeniería Don Pedro, 10
Iglesia de Santa Cristina Paseo de Extremadura, 36
IES Santa Teresa de Jesús Fomento, 9
Real Parroquia de San Antonio de la Florida Paseo de la Florida, 5
Iglesia de San Francisco de Sales Francos Rodríguez, 5
Real Fábrica de Tapices Fuenterrabía, 2
Colegio Inmaculada-Marillac (Hijas de la Caridad) García de Paredes, 37
Parroquia de San Miguel General Ricardos 11
Tribunal Económico Administrativo Central Génova, 29
Escuela Superior de Conservación y Restauración de Bienes Culturales Guillermo Rolland, 2
Tercer Monasterio de la Visitación Paseo de San Francisco de Sales, 48
Palacio del Infante D.Fernando Mª de Baviera Solar en la Cuesta de la Vega
Palacio de Goyeneche: en la actualidad es una dependencia del Museo Thyssen Marqués de Cubas, 19
Cuartel General de la Armada Montalbán, 2
Palacio de Juan March Núñez de Balboa, 78-80
Colegio Fundación Caldeiro Avenida de los Toreros, 45
Palacio Real Plaza de Oriente
Parroquia Virgen de la Paloma y San Pedro el Real – Colegio La Salle La Paloma Fundación Lara. Paloma, 21
Convento de religiosas de clausura: benedictinas de San Plácido Pez, 5
Palacio de Villahermosa, marquesa de Esquilache (Museo Thysen) Paseo del Prado, 8
Convento y Colegio (Madres Mercedarias de Don Juan de Alarcón) Puebla, 1
Agencia Tributaria de Madrid Sacramento, 1
Seminario Conciliar San Buenaventura, 9
Monasterio de la Concepción Francisca “La Latina” Toledo, 52
Monasterio de las Salesas Reales Santa Engracia, 18-20
Palacio de Cervellón Santa Isabel, 44
Colegio de la Sagrada Familia Príncipe de Vergara, 42
Casa-palacio del duque del Infantado*

Carrera de San Francisco, 2 y

Don Pedro, 1

Colegio Ntra. Sra. de la Providencia Monederos, 2
Convento Madres Mercederarias, llamadas «Góngoras» Luis de Góngora, 5 y 7
Convento Salesas San Bernardo, 72

 

En Madrid capital, la renovación de las edificaciones ha hecho desaparecer buena parte de los inmuebles que en su día albergaron checas, como es el caso de algunos palacios, ateneos, hoteles, cines y conventos. Aunque los edificios que las albergaron se conserven, las reformas y adaptaciones han propiciado la desaparición o completa transformación de las dependencias utilizadas por los chequistas. Por otro lado, el crecimiento urbano en lo que eran barrios del extrarradio ha supuesto la transformación de calles enteras y la desaparición de las construcciones características de estas zonas.

Fuentes Fuentes

Bibliografía

  • César ALCALÁ, Las checas del terror (Los métodos de represión de la «justicia roja» y las cárceles clandestinas en Barcelona, Madrid, Valencia y Bilbao), Madrid: Libros Libres, 2007.
  • Tomás BORRÁS, Checas de Madrid. Epopeya de los caídos, Madrid: 1940.
  • Alfonso BULLÓN DE MENDOZA y Luis E. TOGORES (guión y dirección), Mitos al descubierto. 75 aniversario de la Guerra Civil Española. Serie documental de 13 capítulos emitida por Telemadrid. Madrid, 2012. Disponible en https://www.youtube.com/watch?v=jsPYzRP2Sxo&list=PLJQJKO2Ahjl13L11iXykSa6o8Xu8fzset&index=4
  • Rafael CASAS DE LA VEGA, El terror: Madrid 1936 , Madrid: Fénix, 1994.
  • Javier CERVERA, Madrid en guerra. La ciudad clandestina, 1936-1939, Madrid: Alianza, 1998.
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  • José Francisco GUIJARRO, Persecución religiosa y guerra civil. La Iglesia en Madrid, 1936-1939, Madrid: La Esfera de los Libros, 2006.
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